Lucescu, Relaño y la censura por conveniencia

2 10 2008

El señor Lucescu, entrenador del Shakthar por lo visto no tiene demasiado claro lo que es el fair play. Ahí dejo yo unos cuantos apuntes. Para reflexionar un poco, algo que creo muy necesario.

Fair play es que tu equipo salga a un campo a jugar al fútbol. Algo que hombres como Brandao parecieron olvidar anoche. Otros como Srna no tienen claros conceptos como el de agresividad. Ahí queda el absurdo penalty que cometió sobre Andrés Iniesta y que el colegiado inglés -bastante gris anoche- pasó por alto.

Fair play es ser respetuoso con su homólogo en el otro banquillo. Lógicamente es tu rival, porque durante 90 minutos defiende los intereses de su equipo y te quiere ganar. Hasta ahí bien. ¿Pero qué pasa después? ¿quién es Lucescu para increpar a Guardiola, cuando el técnico barcelonista se encuentra atendiendo a los medios españoles?

Fair play es saber reconocer tus propios errores. Los mismo que ayer llevaron a los ucranios a perder el partido. ¿Es que nadie se da cuenta que el primer gol sube al marcador porque hay un portero que no sabe blocar un centro de Bojan? ¿Por qué marca Messi en el 93′? a lo mejor si los hombres del Shakthar se hubiesen olvidado de tanta marrulería y en vez de perder tiempo se hubiesen dedicado a jugar, la prolongación del partido no hubiese sido de 4 minutos.

Fair play es no incitar a la violencia. Y digo yo…¿los gestos de Lucescu a la grada? ¿y declaraciones tipo «En otro estadio el Barcelona no hubiese salido vivo«? ¿pero es que nos hemos vuelto locos o qué? ¿nadie piensa sancionar -incluso inhabilitar temporalmente- a alguien que dice semajante barbaridad? Éste no incita a la violencia y si lo hacen jugadores del Barcelona por celebrar levantando los brazos eufóricos y con la rabia contenida de haber remontado un partido que iban perdiendo…perfecto, porque si es así, algo va muy mal. Y quede claro, que no me pareció nada acertada la actitud inconsciente de algunos futbolistas saludando el sector de los Boixos una vez abandonaban el estadio. Un 10 para los Puyol, Xavi y compañía que tuvieron el «seny»  y la vergüenza suficientes como para no hacerlo.

Por otra parte me gustaría resaltar lo que hace apenas dos días decía el señor Alfredo Relaño en su diario As:

[…] ¿Cómo amonestar, no digo ya sancionar, a egregios personajes como Henry, Etoo, Messi, Márquez y hasta Piqué? ¿Cómo hacer patente, aunque sea a través de una multa simbólica, un reproche a la actitud de esos héroes postizos de una causa superior como es el Barça? No, no habrá tal. Quizá me equivoque. Ojalá. […]

Hoy sin embargo ni una sola palabra de la actitud de Lucescu, que convierte a esos héroes postizos en auténticas hermanitas de la caridad al lado del técnico rumano y su patética reacción en el post partido de anoche. ¿Dónde está la coherencia, señor Relaño? ¿nos la hemos olvidado en casa o sólo la sacamos cuando nos conviene? Y cuidado, que el artículo de hoy no tiene desperdicio. Se trata de, como buen español -será que quienes no lo hacen no lo son de buenos o de españoles o quizá ambas cosas- se pone la medallita y se jacta de autoproclamarse el país cuyos equipos suman mayor número de puntos en la Champions a pesar del auge que las grandes inversiones dan a la Premier inglesa.

¡Bravo Alfredo, una idea brillante! ¿es eso garantía de ganar una competición que todos sabemos, empieza de verdad en el cruce de cuartos, una vez superada la liguilla? si, tú mismo me respondes: […] Ya sé que ocho partidos no suponen un muestreo definitivo, pero sí son un indicador a tomar en cuenta […]. Entonces si tenemos una mala racha, ¿la tomaremos en cuenta por igual? ya te digo yo que no. Entonces pediremos fe y confianza en nuestros equipos y todos esos rollos con los que llenais editoriales los periódicos deportivos. Ya ves que no digo el As. Hablo en general.

Y un último fragmento que no tiene desperdicio: […] Es cierto que el Barça sacó sus puntos de una manera un poquito ful, pero nos vamos acostumbrando. Frente a eso gozo de la fe con que el Villarreal saca adelante su causa en un mundo de ricos. Y admiro el ejercicio de humildad del Madrid en San Petersburgo. Y admiro del Atlético esa enternecedora lucha personal en el retorno a la Champions, afrontando al tiempo a rivales de hoy y fantasmas de siempre […]

El Barcelona saca los partidos un poco ful. Se me olvidaba la insultante suficiencia de tu Real Madrid, que arrasa allá por donde va. Sólo te ha faltado decir que el árbitro se equivocó y de allí sacamos que es amigo de un conocido de un primo de Villar. ¡Ala! ¿cómo no nos habíamos dado cuenta antes? el famoso «Villarato«. El Barcelona jugó mal. Es más, sigue jugando mal, pero eso no quita que ayer le pudo meter 4 a los ucranianos. Bastaba con que Eto’o no se tropezara de forma incomprensible en su mano a mano con el portero y el árbitro hubiese señalado el penalty del croata Srna a Iniesta. Pero esta vez no lo pitó…Si es que unos días te dan y otros te quitan, algo que a muchos como tú os cuesta tanto ver. Por cierto, lo de sacar los partidos con remontada final, con un técnico que tiene flor…eso me suena. ¿No será lo que pasaba con el Madrid de Capello hace un par de temporadas? cuidadito…

Que me asocies la palabra humildad al Real Madrid y casi por extensión al resto de equipos grandes, pero sobre todo al Madrid, es el último chiste que me han contado. Por lo menos me produce el mismo efecto: me da risa.

Lo mismo sucede con los fantasmas contra los que dices, lucha el Atlético. Unos fantasmas que alimentais la prensa deportiva, en este caso concreto la que más informais sobre el equipo. ¿Cuántos años llevais lanzando campanas al vuelo, creando falsas espectativas cada vez que ganaba tres partidos seguidos a pesar de saber que no llegarían a nada? por cierto, aprovecho para felicitar a los aficionados rojiblancos que acudieron al Calderón a animar a su equipo. Impresionante.